Tyler Reddick lucha contra una enfermedad estomacal en la Southern 500
En su intento por asegurar el campeonato de la temporada regular de NASCAR, Tyler Reddick no solo está luchando contra la pista de Darlington, sino también contra una enfermedad estomacal. Reddick está peleando por su vida en el auto No. 45 mientras intenta ganar la Southern 500.
Tyler Reddick solicita ayuda durante la carrera
Tyler Reddick ha estado hablando con su equipo durante la carrera. Durante una de sus paradas en boxes, pidió galletas y pastillas de Tums, pero las cosas no van bien.
Reddick admite tener miedo de enfermarse durante la carrera
Cuando le preguntaron si tenía miedo de enfermarse durante la carrera, Reddick confirmó. “Estoy vomitando, cagándome, todo lo anterior”, explicó Reddick a través de Jonathan Fjeld.
Reddick muestra una gran actuación a pesar de la enfermedad
Para su crédito, Tyler Reddick está ofreciendo una actuación bastante sólida. Si está tan enfermo como suena, entonces su posición entre los cinco primeros en este momento es aún más impresionante. Ha estado en el grupo de cabeza durante toda la carrera y no se ha tambaleado.
El desafío de estar enfermo en Darlington
Darlington es el último lugar en el que uno quisiera estar enfermo. La dificultad de recorrer la pista, rozar el muro, saber que vas a chocar contra él y cómo responder sin estrellarte, todo se vuelve aún más desafiante estando enfermo.
Tyler Reddick enfrenta presión en Darlington
Si yo fuera un apostador, apostaría a que ver a Kyle Larson liderando esta Southern 500 motiva lo suficiente a Tyler Reddick como para correr a pesar de su enfermedad. Antes de la carrera, solo había una diferencia de 17 puntos entre los dos por el campeonato de la temporada regular.
Ahora, en medio de la Etapa 2, ambos pilotos están compitiendo entre los cinco primeros y esperando sumar la mayor cantidad de puntos posible. Larson conducirá mirando por el parabrisas frontal y esperará que Reddick comience a retroceder en el campo antes que tarde.
Reddick y su equipo están en constante comunicación, no solo sobre el auto, sino también sobre el cuerpo del piloto. Llevar al piloto hasta el final de la carrera puede ser tan difícil como llevar al Toyota No. 45 hasta la línea de meta.
Darlington Raceway no muestra piedad
Darlington Raceway es una pista implacable. No muestra piedad. Tyler Reddick deberá realizar una de sus mejores actuaciones si quiere salir como campeón de la temporada regular.