Jim Miller: La lucha contra la enfermedad de Lyme y su regreso al octágono
Jim Miller estaba listo para retirarse. Lidiando con un intenso dolor, confusión mental y agotamiento extremo, el nativo de Nueva Jersey creía que el tiempo y el daño finalmente lo habían alcanzado. Es un riesgo que todo luchador asume cuando parte del trabajo implica recibir golpes en la cabeza, pero no fue hasta varios años después que Miller descubrió que en realidad contrajo la enfermedad de Lyme, una condición transmitida por garrapatas infectadas que puede causar una serie de problemas de salud.
La lucha contra la enfermedad de Lyme
Después de recibir finalmente tratamiento, Miller comenzó el largo camino de recuperación de su salud, lo que le dio una segunda oportunidad en la vida que incluía la posibilidad de continuar su carrera como luchador. Ahora, varios años después de ese diagnóstico, Miller no solo se siente mejor que nunca, sino que a sus 40 años está recuperando el tiempo perdido. A pesar de los problemas físicos y mentales que enfrentó, Miller logró volver a competir al más alto nivel y se convirtió en el luchador con más peleas y victorias en la historia de UFC.
Los efectos de la enfermedad de Lyme en la memoria
Además de los problemas físicos, Miller reveló que la enfermedad de Lyme también afectó su memoria. Debido a un efecto secundario de la enfermedad, Miller experimentó lagunas enormes en su memoria, similares a los síntomas asociados con enfermedades relacionadas con la demencia. Afortunadamente, después de recibir tratamiento, Miller comenzó a sentirse como él mismo nuevamente y pudo retomar su carrera.
La longevidad en el octágono
A pesar de su edad y las dificultades que enfrentó, Miller no tiene planes de retirarse pronto. Atribuye su capacidad para seguir adelante a lo que aprendió sobre sí mismo al superar su diagnóstico de enfermedad de Lyme. Reconoce que la longevidad en el deporte de las MMA no es común, pero él ha logrado mantenerse gracias a la combinación de suerte, genética y tomar decisiones inteligentes en su entrenamiento.
Un posible lugar en el Salón de la Fama de UFC
Una vez que cuelgue los guantes, Miller sin duda hará un fuerte caso como miembro del Salón de la Fama de UFC. A pesar de que algunos argumentan que el tiempo servido no debería ser considerado como un indicador de éxito, Miller está convencido de que lo que ha logrado en su carrera es impresionante y merece reconocimiento. Él cree que su estilo de lucha y su dedicación son las razones por las que la UFC lo ha mantenido en la organización durante tanto tiempo.


