Los exjugadores de los Knicks, RJ Barrett e Immanuel Quickley, recibieron un cálido recibimiento por parte de los fanáticos de Nueva York durante su primer juego contra su antiguo equipo como miembros de los Toronto Raptors. Ambos jugadores fueron ovacionados y recibieron el cariño de los aficionados, lo que demuestra el impacto que dejaron en la ciudad durante su tiempo en los Knicks.
Barrett, quien fue elegido en el tercer puesto del draft de 2019 por los Knicks, se ha convertido en uno de los rostros más importantes del baloncesto canadiense. Ahora tiene la oportunidad de desarrollarse plenamente en Toronto y convertirse en una figura destacada del equipo. Además, se le animará a mejorar su habilidad para pasar el balón y se le permitirá cometer errores sin miedo a las consecuencias.
Por su parte, Quickley ha obtenido un gran beneficio al convertirse en el base titular de los Raptors. Anteriormente, su papel en los Knicks estaba limitado debido al excelente desempeño de Jalen Brunson. Ahora, Quickley tiene la oportunidad de liderar al equipo desde la posición de base y demostrar su valía. Además, se espera que reciba una buena oferta económica en la próxima temporada como agente libre restringido.
En cuanto a OG Anunoby, su habilidad para jugar en ambos extremos de la cancha se ha destacado aún más en los Knicks. Su capacidad defensiva ha sido un factor clave en el éxito del equipo, y ha demostrado su importancia en la cancha. Aunque su papel en Toronto era importante, su juego se ha potenciado aún más en Nueva York.
En general, los tres jugadores han encontrado el lugar adecuado para desarrollarse plenamente en la NBA. Aunque su tiempo en sus antiguos equipos fue valioso en términos de crecimiento y experiencia, ahora tienen la oportunidad de mostrar su verdadero potencial en los Raptors y los Knicks. Con suerte, estos jugadores podrán tener un impacto significativo en sus nuevos equipos y contribuir al éxito en los playoffs en el futuro.
En conclusión, la experiencia de jugar para los Knicks y ser ovacionado por los fanáticos en el Madison Square Garden es algo inolvidable para los jugadores. Ahora, tienen la oportunidad de comenzar una nueva etapa en sus carreras y demostrar su valía en sus nuevos equipos. Con su talento y determinación, sin duda dejarán una huella duradera en la NBA.