Mourinho: una opción controvertida pero experimentada
La historia de Mourinho con el Barcelona es extensa y complicada. El portugués llegó por primera vez al club como asistente de Sir Bobby Robson en 1996, pasando cuatro años en Cataluña. Más tarde, entrevistó para el puesto en 2008 antes de que Pep Guardiola asumiera el cargo, aunque el “Special One” luego sugeriría que “nunca estuvo cerca” de obtener el trabajo.
Mourinho luego desempeñaría el papel de antagonista después de idear una derrota inolvidable del Barca de Pep en las semifinales de la Liga de Campeones 2009/10. Después de guiar al Inter al triplete esa temporada, luchó amargamente con el Blaugrana como entrenador del Real Madrid, poniendo fin al dominio doméstico del Barca en 2011/12. El hecho de que Mourinho esté desempleado ha llevado a algunos a hablar de la posibilidad de que el gran entrenador regrese al Camp Nou, pero sería incorrecto en muchos niveles. “Está claro que terminaré mi carrera sin haber entrenado al Barca”, dijo Mourinho después del triunfo en las semifinales del Inter en 2010.
Rafa Márquez: una apuesta arriesgada
Barcelona podría seguir el camino que eligió en 2008 al emplear al actual entrenador del Barcelona Atlético. Su apuesta funcionó hace 16 años cuando promovieron a Guardiola para liderar el equipo senior, pero sería ciertamente un riesgo ofrecerle a Rafa Márquez un camino similar. El exdefensor del Barcelona pasó siete años en el club y es innegablemente respetado en Cataluña, pero Márquez no ha demostrado con el equipo reserva que es un entrenador de primer nivel en ciernes. Ha hecho un trabajo admirable, eso está claro, y sin duda será considerado para el puesto de Xavi, pero hay opciones superiores y más experimentadas sobre la mesa.
Imanol: una opción local con talento
Si Joan Laporta opta por alejarse de la ruta de 2008, no necesitaría buscar mucho para encontrar una opción externa. España cuenta actualmente con una gran cantidad de talento en el entrenamiento, y Imanol, del Real Sociedad, debería ser considerado sin duda. El entrenador de 52 años ha hecho maravillas en San Sebastián desde que asumió en 2018. En 2021, Imanol llevó a la Real Sociedad a su primer gran trofeo desde 1987 cuando ganaron la Copa del Rey. Luego, en 2022/23, el club logró su mayor cantidad de puntos en La Liga desde 2009/10 y regresó a la Liga de Campeones. El estilo de juego de Imanol se ha destacado en la fase de grupos, superando al finalista de la temporada pasada para quedarse con el primer lugar del Grupo D. Aunque no tiene las conexiones catalanas habituales de Barca, sus métodos son sinónimo de las versiones más audaces de los equipos contemporáneos del Barcelona.
Michel: un técnico en ascenso
Las particularidades de Girona los han llevado a la contienda por el título de manera sorprendente. Michel seguramente será considerado por una multitud de clubes este verano, sin importar cómo termine la temporada 2023/24 para Girona. Después de guiar al club de regreso a La Liga en 2021, el español de 48 años está ahora al frente de una lucha por el título de La Liga. Nadie sabe cómo ha sucedido, pero el entrenamiento de Michel ha sido sin duda fundamental. El caos ordenado y la fluidez implacable de Girona son obra del entrenador, y son excepcionales para ganar superioridades en todo el campo. Su rápida evolución de especialistas en contraataques la temporada pasada a controladores similares al Manchester City esta temporada ha sido extraordinaria, y Laporta pudo ver su brillantez de primera mano cuando Girona venció al Barcelona 4-2 en diciembre.
Motta: un exjugador con filosofía barcelonista
La tendencia del Barca de contratar a aquellos con los que están familiarizados significa que Motta debe considerarse un candidato principal en caso de que Xavi sea despedido. El elegante centrocampista italiano pasó ocho años en el Barcelona como jugador después de graduarse de La Masia. Su astucia en el campo lo ha convertido desde hace mucho tiempo en un entrenador estelar en ciernes, y Motta está cumpliendo actualmente esa trayectoria.
Sus ideas malinterpretadas fueron ridiculizadas una vez, y a Motta le ha llevado algún tiempo entrar en la prominencia generalizada. El pragmatismo del italiano guió a Spezia a una salvación inesperada en la Serie A en 2021/22, y desde entonces ha podido expandir sus horizontes en Bologna. Motta ha transformado un equipo mediocre en un grupo de soñadores, que aspira a jugar en Europa la próxima temporada. Hay un toque de Mourinho en sus ideales, aunque la filosofía de Motta está indudablemente en sintonía con el ADN del Barca. Su trabajo en Liguria ha convencido a muchos de que Motta es uno de los próximos grandes entrenadores en ciernes, y Barcelona haría bien en considerar seriamente al técnico de Bologna.