Según Meltzer, incluso menos personas que sabían sobre el plan de organizar a Reigns vs. Rock sabían sobre el ángulo propuesto de lesión que habría sido una forma de sacar a Rhodes del combate para que Rock pudiera ser insertado. La principal razón de esto es que Rock no quería luchar en el evento Elimination Chamber en Australia, ya que él y la WWE no querían diluir el impacto de su combate de regreso al tener lugar en un espectáculo que se transmite a las 5 AM EST. Básicamente, Rock vs. Reigns necesitaba establecerse y ser aprobado lo antes posible.
El backlash a la idea original
Meltzer señaló que el backlash al ángulo que sí se emitió (Rhodes apartándose) habría sido exactamente el mismo o incluso peor si la WWE hubiera elegido “lesionar” a Rhodes la semana después del Royal Rumble, a pesar de que la compañía creía que el ángulo había funcionado debido a la reacción de la multitud la noche en que se ejecutó. La reacción en las redes sociales fue suficiente para hacer que Rock se convirtiera en un villano, y la compañía ha vuelto a la idea original de tener a Rhodes vs. Reigns en su lugar.
La posibilidad futura
Sin embargo, las insinuaciones que hizo Rock en el “WWE Raw” del 1 de enero fueron suficientes para indicar que la WWE todavía quiere reservar a Rock vs. Reigns en algún momento en un futuro cercano, especialmente dado que la idea de Rock vs. Reigns en WrestleMania supuestamente se discutió mucho en diciembre de 2023, algo que Rhodes tampoco sabía. Entonces, ahí lo tienes. Una complicada red que se ha tejido durante semanas de discusiones dentro y fuera de la pantalla ha llevado a la WWE de vuelta a donde comenzaron, el resultado que los fanáticos de todo el mundo han estado pidiendo desde el final de WrestleMania 39; el “American Nightmare” contra “The Tribal Chief”.
