El jueves por la noche, Liverpool se enfrentó a Atalanta con la esperanza de remontar un déficit de 3-0 en su eliminatoria de cuartos de final de la Europa League.
Uno de los cambios del técnico de los Reds, Jurgen Klopp, vio a Trent Alexander-Arnold hacer su primera titularidad desde febrero, tras recuperarse de una lesión de rodilla.
Alexander-Arnold ayudó a Liverpool a tomar la delantera en el partido, su intento de centro en el quinto minuto golpeó la mano de Matteo Ruggeri en el área para regalar a los Reds un penalti.
Mohamed Salah se adelantó y envió al portero de Atalanta en la dirección equivocada para poner el 1-0 y dar a Liverpool el comienzo perfecto en la noche.
Alexander-Arnold fue absolutamente soberbio en la primera mitad, completando 36 pases, recuperando el balón ocho veces, completando dos regates y ganando un tackle.
