Jose Maria Oliva Lozano, Director de Investigación e Innovación en U.S. Soccer, está al frente de un ambicioso proyecto que tiene como objetivo llevar el fútbol a alturas sin precedentes en la tierra de las oportunidades. Con la visión de que Europa siempre domina, pero con la idea de que con nuevos métodos impensables en Europa, podemos ser mejores.
A department made from scratch
“El objetivo de este departamento es generar conocimiento, compartir conocimiento, dar apoyo a nuestro personal y equipos”, explica. “Gastamos mucho dinero en métodos de recuperación, pero en realidad no sabemos qué tan efectivos son estos métodos. A menudo los vemos en la televisión y pensamos que son geniales, pero luego la realidad es que a menudo no sabemos si tienen un efecto positivo en el rendimiento”, confiesa sobre los estudios que buscan encontrar la estrategia de recuperación más adecuada.
A fear in society
El día en que el fútbol americano, el deporte más popular en Estados Unidos, cambió, la sociedad cambió su forma de ver las cosas. Seguiría siendo jugado, pero a partir de ese momento se jugaría sabiendo que incluso la NFL admitía que el juego representa un riesgo para la salud.
La liga de fútbol americano profesional más grande aceptó, después de años de negar lo evidente, que había una relación entre las conmociones cerebrales sufridas por los jugadores de fútbol americano y la encefalopatía traumática crónica (CTE), que representa las consecuencias neurológicas acumulativas a largo plazo de los golpes repetitivos en el cerebro.
Algo similar sucedió con el fútbol después de que los resultados presentados en la reunión anual de la Sociedad Radiológica de América del Norte (RSNA) arrojaran nueva luz sobre este tema controvertido y sugirieran que los golpes repetitivos en la cabeza pueden tener consecuencias en la función cerebral.
U.S. Soccer se hizo cargo, buscando encontrar el entorno más saludable posible, y en 2016 prohibieron los cabeceos para los niños menores de 10 años. “Sabemos que puede haber cierta preocupación en el país debido a lo que se ha visto en otros deportes con el problema de las conmociones cerebrales”, dice Oliva Lozano sobre la drástica decisión de la federación.
Controlling growth… so as not to discard talent because of their physique
“Cada jugador puede tener un camino diferente. Lo que nos damos cuenta es que cuando vamos a detectar talento, ese talento puede tener diferentes condiciones físicas, técnicas, cognitivas y emocionales. Hay algo muy visible que es el tema de la madurez”, explica sobre los problemas reales a los que se enfrentan los entrenadores todos los días al encontrarse con grupos de edad con jugadores que varían en cuanto a su físico.
De esta manera, Oliva Lozano explica la tecnología de ultrasonido con la que están realizando estudios para detectar la edad esquelética y las estimaciones de altura de cada jugador de fútbol. “Es un método innovador que creemos que puede proporcionar datos objetivos sobre la proyección de ese jugador. Y cuando valoramos el talento, no solo valoramos su rendimiento, porque en ese grupo de edad, el que es maduro (físicamente) puede dominar al que es más inmaduro, que también puede desarrollar otros tipos de habilidades porque tiene que defenderse en ese contexto”, explica.
Watching soccer through glasses?
“El departamento de Empresas anunció recientemente una colaboración con una empresa que te permite disfrutar del fútbol como aficionado desde otro punto de vista. No estar en casa frente al televisor, sino ponerse unas gafas y poder entrar al campo”, explicó Oliva Lozano.
“Será una mezcla de lo real y lo virtual que está empezando a llamar la atención… y te permite estar cerca del entrenador o cerca del árbitro, o si quieres cambiar de posición y ver el juego detrás de la portería a pocos segundos de distancia donde están posicionadas las cámaras”.